Los primeros indicios de la presencia del olivo en el mediterráneo español coinciden con el dominio romano, aunque fueron los árabes los que impulsaron su cultivo, principalmente en Andalucía, convirtiendo a España en el primer país productor de aceite de oliva a nivel mundial. El aceite obtenido de la oliva, que etimológicamente proviene de la palabra árabe “az-zait”, lo que significa el jugo de la oliva, ha servido durante siglos como alimento, se ha utilizado para el alumbrado, o incluso para elaborar medicinas.
Entre sus variedades destacan ; Picual, Hojiblanca, Arbequina, Cornicabra, Picuda , Blanqueta, Lechin, …
En su composición se encuentran los ácidos grasos mono-insaturados, son los más abundantes, y regulan los niveles de colesterol en sangre. Otros de sus beneficios son la ayuda a reducir la hipertensión, gracias a los poli-fenoles y el ácido oleico, y , en el aparato digestivo, actúa como protector frente al exceso de ácidos del estomago. También mejora el PH del organismo, aumentándolo, y previene el estreñimiento. Favorece la formación de membranas celulares y del tejido cerebral, y es un buen antioxidante.
El aceite de oliva es cada vez más apreciado y utilizado en el mundo entero, por sus magníficas propiedades y por su sabor.
Disfrutamos elaborando aceite de nuestros olivos que tratamos y cultivamos de manera ecológica y con mucho mimo, como si de un tesoro se tratara.